Todo tiene un final, pero el final es siempre el
principio, no van separados de la mano,
es algo que acaba y que a la vez vuelve a empezar, pero empieza desde otro
lugar. Ahora ya no eres el que eras, eres tú, pero con otra experiencia.
En la vida, cada momento, cada instante que pasa, es para
nuestro aprendizaje, por eso a veces las cosas salen bien, pero otras,
conllevan obstáculos para nosotros. Pero esos obstáculos, son el desencadenante
para aprender algo que nos hará mejores personas.
El problema viene cuando nos quedamos peleando con los
obstáculos, sin salir de ahí, y entonces no podemos caminar, y nuestro tiempo
pasa, sin que seamos capaces de hacer nada.
Esta noche de final de año, todos estaremos atentos a esas doce
campanadas, nos comeremos las uvas de final de año, brindaremos con vino o con
agua, y nos llenaremos de deseos y
propósitos para el nuevo año. Siempre lo hacemos, y hay algunos deseos que
pasan siempre por nuestra mente mientras sostenemos la copa, pero así año tras
año.
Nosotros mismos boicoteamos nuestros deseos, e incluso
muchos quedan en ilusiones, bellos sueños, pero que no somos capaces de poner
en marcha.
Este fin de año, quiero hacer una propuesta a todos los que
estáis ahí. Esta propuesta es la invitación a un movimiento en nuestra actitud
interior. Y es, que en algún momento del
final o del principio de año, intentemos, igual que son 12 las campanadas,
pensar en 12 cosas pequeñas, que podamos hacer por 12 personas en nuestra vida,
darle una sonrisa, ayudar, escuchar, desear el bien a quien alguna vez te hizo
mal, agradecer a alguien lo que hizo por
nosotros, no hace falta decírselo , sino, sentirlo desde dentro, abrazar a un
pariente desde el sentimiento, no desde la educación, enviar una tarjeta, mail o whatsApp, a
alguien con quien tuviste un conflicto,
decir Te Quiero a todos tus allegados, saluda sonriente a esa persona
del barrio que normalmente críticas , y
deja de hacerlo, y todo lo que a ti se te pueda ocurrir.
Todo esto hará que nuestra actitud interior, sea diferente,
y eso es lo que cuenta. Intentemos cambiar nosotros mismos, porque lo que
queremos siempre, es que cambien los
demás, y es ahí donde muchas veces damos vueltas y vueltas.
Te aseguro que si empezamos el año así, habrá algo que nos
sorprenda, disfrútalo, porque será que te lo mereces.
Gracias y Feliz entrada de Año.
Conchi Romero Medina
Estructura Abierta
Metodología para la Conciencia.
Para ser YO QUIEN SOY, y TÚ, SER QUIEN ERES.
Conchi Romero Medina
Estructura Abierta
Metodología para la Conciencia.
Para ser YO QUIEN SOY, y TÚ, SER QUIEN ERES.